Publicidad

domingo, septiembre 01, 2013

LA DILIGENCIA

Un hombre va a ser conducido a la cárcel, pero quiere vengar a sus hermanos, asesinados por un puñado de maleantes. Un tratante de whisky va de una ciudad a otra mostrando su producto. Un médico borrachín es expulsado por la liga de buenas costumbres de una ciudad. Una prostituta también es expulsada de la ciudad. La mujer embarazada de un capitán de caballería va en su busca. Un jugador pendenciero quiere probar suerte en un nuevo territorio. Un banquero ha estafado a sus clientes.

Toda ese gente más el conductor y el sheriff del lugar se unen en un viaje a través del desierto, con el peligro constante, amenazante pero nunca del todo presente de Geronimo y sus indios. En cualquier momento estos pueden atacar la diligencia. Cada minuto que pasa, cada paso de los caballos es más probable el ataque. Pero es un ataque que no llega.

En cada posta, las noticias son peores. La mujer embarazada da a luz. Su marido ha muerto. La tensión entre los viajeros de la diligencia crece. La tensión y la aventura son claves en esta historia. Lo que es tan importante como lo que se ve. El amor entre el futuro preso y la prostituta. La venganza a toda costa que este planea contra unos maleantes que le superan en número.

La diligencia es un clásico de la aventura. Pero también es un clásico de la tensión, esperando a unos indios que atacarán, a una venganza que debe producirse. El comportamiento humano en esas circunstancias, el más bajo y el más alto, el que se crece en su humanidad y el que se vuelve más deleznable, quedan patentes, son mostrados.

Una película que cuenta una historia de las pasiones humanas, el amor, la venganza, la ambición, el desprecio, la lucha de clases y condiciones, los vicios y su inevitable arrastre, la valentía, el miedo. Y todos son salvados por la diligencia que no para su camino, que no deja de surcar el desierto cargada de gente.



No hay comentarios: