Publicidad

martes, septiembre 03, 2013

CASPA RADIOACTIVA, HUMOR QUE QUEMA

Caspa Radioactiva, comida cerebral para mutantes felices es el título que el dibujante argentino Darío Adanti daba a su sección en El Jueves. Y es también el título de la recopilación definitiva que se publicó en forma de libro hace ya algunos años.

Caspa Radioactiva es sobre todo humor brutal, directo y sin remilgos. El humor se hace siempre contra algo y puede ser más dulce o más amargo contra lo que se hace, puede ser más duro o más blando, puede ser más humano o más inhumano. En esta elección, Adanti siempre elige la más radioactiva, la más antisocial, la más brutal.

Las tiras de Adanti están llenas de personajes sin moral, sin escrúpulos, sin remilgos familiares, sociales o sexuales. El hombre gato, Niño Dios o la familia tostada son algunos de los personajes que circulan por estas historias. Tiras breves, de dos, tres o cuatro cuadros, donde se usa el final sorpresa y brutal.

Amputaciones, dolor, problemas sexuales, comentarios ácidos sobre la realidad, la historia o los productos de consumo recorren las páginas de Caspa Radioactiva. Un mimo que es tetrapléjico. Un padre que da consejos de como ser abyecto a su hijo. Un Niño Dios que usa sus poderes para multiplicar las drogas.

Así es el humor de Adanti, brutal, irónico, absurdo, duro. Un humor que funciona. Pero que puede llegar a escocer, como el Listerine. Y que no pretende reflejar la sociedad, pero que de una forma un tanto lateral la refleja, muestra, desde una óptica aumentada, lo peor del ser humano y su comportamiento.

Una compilación de todo ese material apareció en forma de libro con el título de Toda aquella Caspa Radioactiva, que por desgracia es difícil de conseguir en este momento. Más de 300 páginas con las cosas de Adanti, con la caspa radioactiva que se nos cae de la cabeza y nos quema los hombros. Con la caspa de la vida absurda e imposible del Hombre Gato o de Niño Dios, siempre estrujados por el destino, siempre provocando la carcajada de la brutalidad y el dolor.     



No hay comentarios: