Publicidad

viernes, abril 09, 2010

TODAS LAS VECES

Como algunas noches no sé qué hacer, paseo. Es una cosa muy relajante. He estado mucho tiempo sin carnet. Cuando lo tenía en lugar de pasear lo que hacía era conducir. Y me relajaba mucho. Pero ahora paseo. Ya he cogido la costumbre y me hace mucho bien. Así que paseo.

Lo que no sé es por qué mis paseos acaban siempre en la puerta de tu casa. Por qué mis pasos siempre llevan a ti. Yo te evito, tomo el camino contrario, lejano, pero vuelvo al final. Empiezo a pensar, a elaborar pensamientos que se mantengan alejados de ti. Pensamientos que no tengan que ver contigo. Que a veces tienen que ver con otras. Pero da igual, acabo en la puerta de tu casa. Y siempre salgo de allí corriendo, porque temo encontrarme contigo.

La última vez que me encontré contigo ya sabes qué pasó. Que no supe qué decir. Y parecía que te estaba espiando. No es así. Sólo te espié tres semanas. Luego ya no. Ahora ya no. Sólo quiero no volver a tu calle, a la puerta de casa, levantar la vista y no ver tu edificio. Pero no puedo. No puedo. No sé. Me gustaría mudarme. Pero tampoco puedo.


Siempre a ti

No hay comentarios: